La sonrisa siempre será una carta de presentación ante otras personas. Una que tiene la capacidad de impactar positivamente en las interacciones sociales y la autoestima. Sin embargo, algunos factores pueden manchar u oscurecer nuestros dientes, lo que puede no ser tan atractivo en términos de estética.

De ahí la existencia de tratamientos como el blanqueamiento dental. Una técnica considerada por muchos como una solución efectiva para recuperar la blancura de los dientes y su brillo natural.

Es por ello que, te explicamos qué es el blanqueamiento dental, cómo se realiza y cuáles son sus principales ventajas.

¿Qué es el blanqueamiento dental?

Es un procedimiento cosmético que se realiza con la intención de mejorar la apariencia de los dientes, es decir, que luzcan más blancos y brillantes.

El tratamiento no es invasivo y, por lo general, se hace en una clínica dental bajo la supervisión de médicos expertos. Sin embargo, también suele llevarse a cabo en casa a través de los famosos kits de blanqueamiento, los cuales fueron diseñados para el uso personal.

¿Cómo se realiza el blanqueamiento dental?

El proceso específico para el blanqueamiento dental puede variar dependiendo del tipo de tratamiento elegido.

Métodos generales

Blanqueamiento profesional en clínica:

Es un tratamiento que suele implicar el uso de agentes blanqueadores potentes.

Antes que nada, el dentista hace una evaluación previa sobre la salud bucal del paciente. Así puede averiguar si tiene alguna enfermedad periodontal, caries o restauraciones dentales.

Luego, aplica protección a las encías y labios para que el agente blanqueador no entre en contacto con tejidos sensibles, evitando irritaciones o quemaduras químicas. Y, finalmente, aplica el agente blanqueador sobre los dientes.

Este tipo de método tiende a ofrecer resultados más rápidos y efectivos. Pero puede que requiera más de una sesión según el grado de blanqueamiento que quiera el paciente.

Blanqueamiento en casa:

Incluyen kits de bandejas, geles aplicadores y tiras blanqueadoras. Estos productos fueron diseñados para un uso más prolongado y gradual, además, contienen concentraciones más bajas de peróxido que el agente blanqueador.

En este caso, lo ideal es que el proceso sea supervisado por un dentista para asegurar una aplicación adecuada y segura.

Métodos específicos

●      Blanqueamiento con Luz LED o Láser. Requiere la aplicación de un gel blanqueador sumado a la luz LED o láser para activar y acelerar el proceso de blanqueamiento. Por lo general, en varias sesiones cortas de entre 15 a 30 minutos.

●      Blanqueamiento sin Luz. El gel blanqueador utilizado es más potente, pero no hay necesidad de luz o láser. En este caso, los dientes permanecen con el tratamiento durante un período prolongado en cada sesión.

●      Kits de blanqueamiento con bandejas. Abarca el uso de bandejas personalizadas, las cuales se adaptan a la forma de los dientes y se llenan de gel blanqueador. Este kit se usa por varias horas al día o durante toda la noche.

●      Tiras blanqueadoras. Son tiras delgadas y flexibles que vienen recubiertas con gel blanqueador y se adhieren a la superficie frontal de los dientes. Por lo general, se aplica 30 minutos al día por varias semanas.

Cada uno de estos métodos tiene sus propios pasos y recomendaciones, y se ajustan en función de la tecnología que se emplee. Así como de la intensidad del tratamiento requerido.

Elegir uno de ellos depende de tus preferencias, qué tan rápido quieras los resultados y el presupuesto que tengas.

Ventajas del blanqueamiento dental

Este tipo de tratamiento cosmético es muy popular porque ofrece múltiples beneficios, aparte de mejorar la apariencia de la sonrisa.

A continuación detallamos algunas de las ventajas principales:

Mejora estética

La principal ventaja, por supuesto, es el aspecto que deja en los dientes.

Algunos alimentos o bebidas pueden ser los responsables de las manchas en nuestros dientes. Según los datos del ICOEV (Ilustre Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Valencia), la lista incluye el té, el café, el vino tinto, ciertas frutas y verduras, entre otros.

El blanqueamiento dental puede eliminar esas manchas. De esta manera, se logra una sonrisa más atractiva, lo que suele aumentar la confianza en sí mismos.

Resultados rápidos y efectivos

Es posible que con el blanqueamiento dental profesional obtengas resultados visibles en una o dos sesiones, según el método empleado. Mientras que si optas por remedios caseros, deberás esperar meses para comenzar a ver cambios notables.

Accesibilidad y alternativas

El blanqueamiento dental es accesible para muchas personas y se encuentra disponible de distintas formas. Así podrás escoger una ajustada a tus necesidades y presupuesto.

Resultados a largo plazo

Con el cuidado adecuado, los resultados del tratamiento pueden perdurar durante varios años.

Claro que los dientes se pueden volver a decolorar, eventualmente, por el consumo de ciertos alimentos y bebidas. Sin embargo, esto es progresivo y siempre tienes la opción de cuidarte mediante una buena higiene bucal y retoques periódicos.

Entonces, aparte de mejorar tu sonrisa, el blanqueamiento dental ofrece resultados rápidos y efectivos. Además, existen diversas opciones accesibles para casi cualquier persona. Lo más importante es acudir a profesionales que garanticen la seguridad y eficacia del tratamiento.

Consideraciones y precauciones

Como bien mencionamos, el blanqueamiento dental no es invasivo. No obstante, es esencial considerar algunos riesgos y precauciones para lograr que los resultados sean efectivos y minimizar efectos adversos.

Riesgos y potenciales efectos secundarios

La sensibilidad dental temporal y las molestias en las encías son algunos de los efectos secundarios más comunes. Sobre todo, cuando se usan fórmulas más concentradas en tratamientos profesionales.

Criterios para un candidato ideal

Aquellos que tengan una buena salud bucal son candidatos ideales, esto significa, sin caries activas o enfermedades en las encías.

Cabe resaltar que, el tratamiento no es recomendable para personas con restauraciones dentales, por ejemplo, coronas o carillas, ya que estas no se blanquean. De someterse a un proceso como este, el color dental sería inconsistente.

Seguridad y respaldo profesional

Cuando el blanqueamiento dental se realiza con el apoyo de un dentista calificado, el procedimiento es seguro. Primero evalúan la salud bucodental del paciente para asegurarse de que es un buen candidato. Por lo que se minimiza el riesgo de efectos secundarios, como daño al esmalte o sensibilidad dental.

Ten en cuenta que, según los datos recogidos por la BBC, la Asociación Dental Británica advierte sobre la falta de formación médica y dental de los esteticistas para determinar si los candidatos son apropiados o no para dicho tratamiento.

Por último, se recomienda lo siguiente:

●      Evitar alimentos y bebidas que puedan manchar el esmalte de los dientes.

●      Abstenerse de fumar.

●      Mantener una estricta rutina de higiene dental respecto al cepillado. También implica usar hilo dental y enjuagues bucales.

●      Hacerse revisiones regulares y limpiezas profesionales.

Todo ello ayudará a mantener los resultados del blanqueamiento y prolongar los efectos para conservar una sonrisa radiante.

¡No dudes en contactarnos en nuestra web o a través del WhatsApp!