¿Qué es un implante dental?

Hay muchos factores por los cuales podemos perder un diente, desde el principal que es la edad o por accidentes o incluso por enfermedad periodontal. Anteriormente era muy común escuchar sobre puentes o dentaduras postizas, pero en la actualidad estas ya no son prácticas tan recomendadas, puesto que la tecnología ha avanzado y ahora podemos recurrir a los implantes dentales.


Si estás considerando implantes dentales pero no estás seguro de qué esperar aquí te dejaremos unos puntos para que consideres este procedimiento.

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¿Qué es un implante dental?

Los implantes dentales son una opción de tratamiento muy estable y duradero para el reemplazo de dientes que se han perdido. Un implante dental está compuesto por un implante de titanio que es muy pequeño, se coloca quirúrgicamente en la mandíbula con anestesia local; a este implante se le coloca una corona de aspecto natural para completar la sonrisa.

Consideraciones en implantes dentales

Los implantes dentales generalmente constan de dos partes, por lo cual requieren una serie de visitas al dentista para asegurar que el implante que está asegurado a su mandíbula se haya integrado correctamente; este proceso puede tomar entre 3 y 6 meses y es posible que mientras esto ocurra no tengas un diente permanente. En la mayoría de los casos, se coloca una corona temporal sobre el implante mientras se coloca en su lugar. Una vez que el implante esté asegurado, se colocará una corona permanente en él.

La corona será diseñada conforme a los dientes restantes tanto en tamaño como en forma y color, logrando así una sensación natural.

Los implantes tienen la ventaja a diferencia de otros procedimientos donde ya no se requieren visitas al dentista o reajustes constantes; solo hay que tratarlos como a sus dientes naturales y llevar su revisión cada 6 meses. Esto a la larga ahorrará tiempo y dinero.

¿Cuánto dura un implante dental?

Los implantes dentales como ya lo mencionamos están diseñados para ser un tratamiento definitivo, es decir que una vez que todo esté en su lugar y con su correcto funcionamiento no hay que hacer nada más. Hay estudios que han detectado una tasa de supervivencia de los implantes de hasta el 97% a los 5 años y del 95% a los 10 años, lo que significa que solo el 5% de los implantes han tenido que ser tratados posteriormente por alguna complicación antes de los 10 años.

De hecho se considera que un implante con todos los cuidados puede estirar su vida útil hasta los 20 o 25 años si se llevan a cabo todas las medidas de higiene que se recomiendan:

  • Higiene dental diaria

  • Cambios en el estilo de vida

  • No consumir tabaco ni sustancias que manches tus dientes

  • Acudir a revisiones periódicas de rutina con tu dentista

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